"Dos sensaciones
nada recomendables, que al mezclarse y agitarse en una coctelera
resultan una peligrosa combinación solamente comparable con la
explosión del volcán de Pompeya: Fiero, letal y abrasador.
Pretendo hacer un
análisis un poco más en profundidad de ese instante en el que
abandonas toda consciencia para adentrarte en el lugar más ardiente
y al mismo tiempo triste de tu mente.
Podríamos empezar
por deducir qué lo provoca. Y como siempre es mejor hablar desde el
punto de vista propio antes que generalizar, para evitar discusión y
malas interpretaciones, eso mismo voy a hacer. En mi caso,
normalmente me siento así cuando alguien con/o algo quiere provocar
mi enfado o tristeza y yo no quiero permitirlo. Entonces se genera un
debate emocional que no me deja decidir si mantenerme sereno o dejar
que se manifieste la agresividad que impulsivamente quiero liberar.
Aquí planteo que no se me malinterprete: Ni soy agresivo por lo
natural ni tengo ningún tipo de conducta peligrosa o dañina. Antes
de juzgar planteémonos que todos tenemos arrebatos y enfados. Y de
ahí que cada cual saque sus propias conclusiones.
Unos buenos
ejemplos de en qué situaciones se puede generar este sentimiento, es
cuando te recriminan que has hecho mal algo para lo que pediste ayuda
y te la negaron. Sí, es un caso personal. ¿Nunca os ha pasado? O
como cuando lo das todo para conseguir algo que al final se te escapa
de las manos. Tantas situaciones que a nadie le gustaría vivir...
Mi consejo es que
intentéis evitar que nadie se sienta así jamás. Porque duele, y
duele mucho. Es sentirse mal con uno mismo, a la vez que con el
mundo. Y por un momento, aunque sólo sea un instante, ODIAS. Y odiar
siempre es horrible.
A veces me
planteo, que por qué doy la chapa de forma tan pesada y cansina. Y
me contesto que sólo intento hablar de sentimientos. Porque es algo
de lo que se está perdiendo la costumbre, por miedo a abrirnos a los
demás. Y los sentimientos es lo único que nos diferencia a los
humanos de los monstruos que fuimos mucho tiempo atrás. Digo yo."
Leo.